18/5/09

Indulto


Durante los meses que trabajé en una librería en Madrid, uno de mis trabajos era hacer las devoluciones. Es uno de los momentos más duros porque muchas veces tienes que devolver a las editoriales libros que no entiendes porque la gente no los compra y no puedes devolver aquellos que son infumables, pero que la gente compra con auténtica devoción. También tenía su parte positiva, que era el indulto. Libros a los que coges cariño o que te parece que merecen otra oportunidad.

Benedetti nunca necesitó el indulto, siempre tuvo su espacio, aunque no vendiese todas las semanas, aunque sus libros llevasen allí meses. Es la diferencia que tenía y tendrá Benedetti con esos autores que la gente compra porque ha ganado el Planeta, porque hay un hombre muerto frente a un cuadro de Da Vinci,...

Mario Benedetti hizo LITERATURA en mayúsculas, nunca devolví un libro suyo ni se me pasó por la imaginación, todo lo contrario, intentábamos ampliar su fondo. Y cada vez que la gente cogía Pedro y el capitán o su Antología poética, todo tenía sentido.